martes, 2 de octubre de 2012

Buscando mis raíces, abandoné la ciudad y sus plazas. Ya no más puentes ni pasos a desnivel. Ya no más muerte estéril ni seres torturados que presumimos comida. Cuántos intentos de control y límites a la libertad. Es un no a la risa, es la mirada dura de una mujer que sufre, es la dureza disfrazada de ciencia, es la destrucción ataviada de tecnología. La cerradura se cerró tras de mi y la bruma fue mi despedida. Miré desde el muelle los lotos flotando en el río, miré hacia el mar y me puse de rodillas en la arena. Llegué al pueblo de mis ancestros, que estaba de fiesta, y hasta el viejo carcelero participó descalzo en la danza de la vida. [Paréntesis11] (2oct12)

2 comentarios:

  1. A veces hay que cerrar puertas sin remedio; pero... esos cierres nos pueden llevar y nos suelen llevar a un lugar más feliz.

    Cerrando círculos...

    Precioso tu blog, como todo lo que tocas.

    Un beso.

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    1. Qué ilusión encontrarme tu mensaje, querida Sakkarah. Cuando pienso que mucho de este blog, desde su origen y su diseño, es tuyo.... Si no fuera porque tú me animaste. Gracias, querida. Un gran beso y seguiremos encontrándonos en estos espacios maravillosos...

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