Nuncamás entiende a la perfección lo que es tener pájaros en la cabeza.
No es pernicioso. Por el contrario: muy recomendable para quien desee
percibir la realidad desde la otra orilla, haciendo uso de la rara
habilidad de algunos seres humanos para pensar lateralmente. Y sin
olvidar el paraguas.
domingo, 27 de octubre de 2013
jueves, 17 de octubre de 2013
ESFERA
La
pregunta no es si es posible ver el futuro, sino más bien si conviene o
resulta deseable hacerlo. O si no sería preferible entender el tiempo
como lo que realmente es: la armonía de ciclos eternos y órbitas
continuas que giran transformándose en instantes, pulsaciones y latidos
sin principio, sin final, sin métrica ni torpes conteos ni
delimitaciones divisorias. Las sorginak atisbamos tan solo un
intervalo del orbe temporal, un soplo de su inconmensurable esencia, y
ello nos basta. No oteamos innecesariamente sus horizontes ni vivimos
fuera de su influencia. Tampoco desperdiciamos esa visión ni utilizamos
tal sabiduría con propósitos nefarios. El poder de las brujas para
acceder al porvenir no entraña sortilegios ocultos ni encantamientos
herméticos. Es un poder íntimo y peculiar que se hermana con el vaivén
de las mareas, la intensidad de los ciclos lunares, la memoria colectiva
ancestral, las brújulas del tiempo y la benevolencia de la Diosa. Nos
ayudamos de instrumentos, es cierto, pero son solamente ecos y
resonancias que confirman nuestros ensalmos y fortalecen nuestros
augurios. La esfera ambarlunar revela no el futuro, sino el secreto del
pasado, que es, en realidad, la llave del porvenir.
[LCV Paréntesis26] (17oct13)
[LCV Paréntesis26] (17oct13)
Suscribirse a:
Entradas (Atom)